Buenas tardes:
Tengo unos mellizos de 14 años que desde pequeños han estudiado en clases diferentes. Aun así uno de ellos presenta problemas de aprendizaje desde pequeño, creemos su padre y yo que por complejo de inferioridad con respecto a su hermano que es mucho mas brillante en el colegio, mas sociable y deportista.
Tras acudir al psicólogo nos informan que el niño en cuestión presenta un CI de 145, mientras que el mellizo»brillante» tiene un CI normal-alto(124). Tras varios años de fracaso, el curso pasado decidimos cambiarlo de centro para separarlo de su hermano aun más, pero aun así no mejora, de hecho esta repitiendo curso.
Estas Navidades tenemos cita en un centro especializado en niños con sobredotación pero mientras tanto me gustaría saber si hay algún estudio, norma, artículo o similar sobre mellizos con este problema. Como tengo otros mellizos de 5 años no me gustaría que me volviese a ocurrir.
Muchas gracias.
PILAR GARCÍA DE PAREDES
El caso de tu hijo tiene varias vertientes. Estamos ante un adolescente de altas capacidades, que repite curso y que además tiene un hermano mellizo que destaca más que él en diversas facetas de la vida. Vamos a desgranar uno por uno estos aspectos.
En primer lugar nos encontramos con el tema de las altas capacidades. Haces muy bien en acudir a un centro especializado en este tipo de niños para que os orienten, tanto a la familia como a los profesores, sobre como debe ser su plan de estudios. Tienes que tener en cuenta que tu hijo posee una memoria para recuperar la información que además de buena es amplia y rápida; que sus niveles de generalización y comprensión de las materias que se explican en clase están por encima de la media; que tiene una buena capacidad de concentración y de atención. Estas habilidades intelectuales las está poniendo en juego en un ambiente escolar con niños que tienen su misma edad cronológica pero con una edad mental diferente. Esta diferencia entre la edad mental de un alumno de altas capacidades respecto a sus compañeros de clase, hace que estos niños se aburran en el aula y que obtengan unos resultados académicos mediocres.
El segundo aspecto que mencionábamos al inicio de esta respuesta es la obtención de un bajo rendimiento académico en niños con altas capacidades. Ya hemos mencionado alguna anteriormente, pero vamos a precisar un poco más. Las causas de estos resultados son de diferente índole que seguidamente vamos a enumerar: hay causas de tipo escolar. Los centros educativos, por lo general, están más preparados para prestar más atención a los alumnos con algún déficit que a los alumnos con altas capacidades. Una segunda causa la podemos encontrar en la personalidad el propio alumno. Estos niños presentan una disincronía, un desfase, una diferencia entre el desarrollo de su capacidad intelectual y el desarrollo de su capacidad emocional, siendo esta la apropiada para su edad cronológica. Debido al desarrollo precoz de su pensamiento abstracto estos niños captan información con una carga emocional que no saben integrar de forma adecuada y que, a su vez, les lleva a expresar sus emociones de una forma que las personas que le rodean no terminan de entender. Este proceso tiene varias consecuencias, la primera una frustración que conlleva sentimientos de desánimo, baja autoestima, rechazo de los demás, aislamiento social. Ellos se ven y se perciben como diferentes, como menos capaces de los demás. Otro factor que contribuye a la obtención de malos resultados académicos es la presión que ejercen sobre ellos sus compañeros. Éstos, a veces, no aceptan bien a alumnos que sobresalen por su inteligencia, otras veces son los alumnos de altas capacidades los que interactúan de forma inapropiada con el resto de la clase como por ejemplo cuando utilizan su agudo sentido del humor. Y por último el ambiente familiar también puede ser una de las causas de este bajo rendimiento académico. La familia muchas veces no sabe como actuar con un miembro que, debido a su potencial intelectual, cuestiona muchos aspectos, tiene intereses propios de niños mayores, presentan unas conductas no apropiadas para su edad.
Como tercer aspecto que influye en la no consecución de los objetivos académicos propuestos para su edad tenemos la existencia de un hermano mellizo que sí cumple con todas las expectativas puestas en él. Seguramente tú no harás comparaciones entre los mellizos, pero puede que otras personas, el colegio o incluso ellos mismos sí lo hagan. En este punto debes trabajar con ellos haciendo que se sientan especiales por si mismos, que sean conscientes de su individualidad, que el hecho de haber nacido el mismo día y en la misma familia no es sinónimo de ser “la mitad de uno”, que pueden tener gustos comunes porque pertenecen a una misma familia, pero que también pueden tener gustos diferentes y tanto uno como otro son aceptables.
Respecto a los otros mellizos no temas, no tiene por qué ocurrir; pero si ten en cuenta el hecho de que no los comparen ni se comparen entre ellos, y destacar siempre la parte positiva que tengan.
Inmaculada Núñez-lagos y Bau
Licenciada en Psicología.
Orientadora familiar.