Autor: padresycolegios.com
Tengo un hijo de 16 años que hasta 3º de la ESO le ha ido muy bien en los estudios. A mediados de 4º, sin embargo, tuvo una depresión y suspendió el curso. También le quedaron algunas asignaturas; ha intentado recuperarlas y estaba convencido de que había aprobado, pero ha vuelto a suspender. Él tiene las ideas muy claras y quiere seguir estudiando, pero quiere intentar recuperar este curso, en el cual no ha trabajado lo suficiente, por falta de motivación, ayuda, etc. Quisiera saber qué se puede hacer para que pueda aprobar el curso, ya que estaba mejorando de forma muy positiva y se ha vuelto a hundir. La psiquiatra me dio un informe en el que me puso que para él no sería positivo volver a suspender, porque ahora se siente muy mal. Si este verano hace recuperación, le pueden dar el graduado y pasar a 1º de Bachillerato, que es lo que él quiere. Hay niños que no quieren estudiar, pero no es su caso. ¿Qué tenemos que hacer? ¿Qué ayudas hay? ¿Qué pasos tenemos que seguir? Muchas gracias.
Carmen, Barcelona
Por lo que cuentas, tu hijo está evolucionando bien de su depresión, pero, lógicamente, todavía se muestra inseguro con respecto a sus posibilidades y se desmotiva con facilidad. Sin embargo, es fundamental que tu hijo se haga cargo de que necesita ayuda y que esté dispuesto a poner los medios necesarios para conseguir sus objetivos.
El hecho de que quiera seguir estudiando, que tenga una meta, es una buena motivación. Sin embargo, se encontrará con baches emocionales a lo largo del camino.
Por otro lado, tendrá lagunas académicas en las materias y falta de hábito de estudio, por lo que no es fácil que pueda superar las asignaturas que le quedan sin necesitar cierta ayuda externa.
Ahora precisa una persona que le apoye en sus estudios y también en su personalidad. Lo ideal sería que acudiera a a un psicopedagogo para que le ayude en las materias, le pueda enseñar estrategias de aprendizaje más eficaces y, a la vez, refuerce su autoestima.
Además de todo esto, sería buena opción buscar la ayuda de una academia o, incluso, pensar si necesitará un apoyo más constante durante el curso. Puede que hubiera sido buena idea acudir a un curso intensivo durante el verano en régimen interno.
Lo más importante es que tu hijo pueda contar con vuestro apoyo, ocurra lo que ocurra ahora, en los exámenes de septiembre.
Mª José Javaloyes